Fluido de frenos: ¿Para qué sirve y cuáles son sus designaciones?
El fluido de frenos es un componente fundamental en todo vehículo que dispone de un sistema de frenos hidráulico. Su función principal es asegurar la transferencia de la fuerza necesaria para reducir la velocidad o detener el vehículo. Una elección inadecuada o un mal mantenimiento pueden comprometer gravemente la seguridad al conducir.
En este artículo, descubrirás qué es el fluido de frenos, los diferentes tipos que existen, cómo utilizarlos correctamente y qué precauciones deberías tener en cuenta.
Contenido
¿Para qué sirve el fluido de frenos?
El fluido de frenos es responsable de transmitir la fuerza mediante presión. Los fluidos no son significativamente compresibles, por lo que la fuerza aplicada se transfiere directamente a la compresión de los enlaces químicos del líquido.
Dado que los aceites pueden dañar los sellos y las mangueras del sistema de frenos, el fluido de frenos no suele estar elaborado a partir de petróleo. La mayoría de los fluidos de frenos están compuestos por glicol y éter, aunque también hay fluidos fabricados con aceites minerales.
Averías en el sistema de frenado: ¿Cómo se manifiestan?
Todos los fluidos de frenos deben cumplir con ciertos requisitos establecidos por diversas organizaciones, como la SAE (Sociedad de Ingenieros Automotrices) y regulaciones de diferentes autoridades.
A nivel global, la designación de los fluidos de frenos utiliza la abreviatura DOT, que corresponde al Departamento de Transporte de los Estados Unidos, responsable de establecer las especificaciones de rendimiento para estos fluidos.
Designaciones de los fluidos de frenos
DOT 1
DOT 2
DOT 3
DOT 4
DOT 5
DOT 5.1
Los fluidos DOT 2, DOT 3 y DOT 4 son compatibles entre sí, pero el DOT 5 no debe mezclarse ni reemplazarse con ningún otro líquido debido a la composición del fluido de frenos. El DOT 5 es a base de silicona, mientras que los otros son a base de polietilenglicol. El fluido DOT 5.1 se elabora sobre una base similar a la del DOT 4 y es adecuado para condiciones extremas.
Puesto que el DOT 5.1 está elaborado a partir de polietilenglicol, puede mezclarse con el fluido DOT 4. En general, los fluidos de frenos con una designación de número más alto ofrecen mayor calidad, mejor rendimiento y son más adecuados para condiciones exigentes que aquellos con un número más bajo.
Designación | Punto de ebullición seco | Punto de ebullición húmedo | Viscosidad | Componente principal |
DOT 2 | 190 °C | 140 °C | - | Aceite de ricino/alcohol |
DOT 3 | 205 °C | 150 °C | 1500 mm2/s | Éter de glicol |
DOT 4 | 230 °C | 155 °C | 1800 mm2/s | Éter de glicol |
LHM | 249 °C | 249 °C | 1200 mm2/s | Aceite mineral |
DOT 5 | 260 °C | 180 °C | 900 mm2/s | Silicona |
DOT 5.1 | 260 °C | 180 °C | 900 mm2/s | Éter de glicol |
El punto de ebullición seco se refiere a un fluido nuevo que aún no ha absorbido humedad, mientras que el punto de ebullición húmedo se relaciona con un líquido que ya ha absorbido un 3.7 % de agua, que es el promedio de absorción de humedad.
1. Viscosidad
Para garantizar un funcionamiento confiable del sistema de frenos, el fluido de frenos necesita mantener una viscosidad constante en un amplio rango de temperaturas, incluidas las muy bajas.
Sistema de frenos antibloqueo (ABS)
Esto es especialmente importante en sistemas de frenos que cuentan con el sistema ABS o el sistema ESP.
2. Compresibilidad
Los fluidos de frenos deben mantener una baja compresibilidad, incluso con temperaturas cambiantes. Esto es crucial para asegurar una sensación constante en el pedal de freno.
Si el fluido de frenos no mantuviese una baja compresibilidad, se requeriría un movimiento mayor del pedal de freno para transferir la misma cantidad de fuerza al pistón de la pinza de freno.
3. Corrosión
Los fluidos de frenos no deben provocar corrosión en los metales utilizados dentro de los componentes del sistema de frenos y también deben proteger esos componentes de la corrosión causada por la entrada de humedad al sistema.
Una ventaja del fluido de frenos basado en aceites minerales LHM es la ausencia de corrosión.
Conclusión
La elección adecuada y el correcto mantenimiento del fluido de frenos son clave para garantizar la seguridad de tu vehículo. Sigue las recomendaciones del fabricante y revisa regularmente el estado del líquido para minimizar el riesgo de fallos en los frenos.